Floración y cuajado de la uva ¿qué es?

Blog, Viticultura

En Coviñas, sobre el mes de mayo aparecen los embriones de las flores en el viñedo y a continuación se produce su floración. Las pequeñas flores blancas se abren esperando ser polinizadas por el viento y por los insectos. Una vez la flor es polinizada se empezará a desarrollar el grano de uva. Un proceso mágico y espectacular con el que la viña nos deleita cada año.

En la floración las plantas necesitarán unas ciertas condiciones como temperaturas en torno a los 15-20 grados y mucha luz solar  (características ideales en la zona de Utiel Requena en esta temporada). De lo contrario la polinización se verá afectada, pausando el cuajado de la fruta. Pero, ¿qué es el cuajado?

El cuajado es, simplemente, otro proceso dentro del ciclo vegetativo de la vid en el que la flor se convierte en fruto, en uva. En este proceso no todas las flores se convertirán en fruta. Tras el cuajado esas las flores no polinizadas desaparecerán. Esto puede provocar un menor rendimiento de la viña. El cuajado se completa en dos o tres semanas después de la floración. Pero, si por el contrario la cantidad de racimos es excesiva se procederá posteriormente al llamado aclareo para retirar racimos antes de la maduración buscando la cantidad deseada para una correcta maduración de la uva.

La mayoría de las flores de la viña son hermafroditas y la apertura de esta flor es muy característica. Los pétalos se separan por la base y la corola cae empujada por los estambres. Después de abrir la flor la apertura de las llamadas anteras (sacos polinicos) se hace hacia el exterior y el polen cae sobre las flores vecinas.

Las flores de un viñedo son pentámeras, es decir, tienen cinco piezas en cada vertilicio, y están formadas por:

-Cáliz formado por cinco sépalos verdes.
-Corola, compuesta por cinco pétalos formando un capuchón
-Androceo, formado por cinco estambres
-Gineceo, formado por dos carpelos soldados

 

Floración viñedo

 

Floración viñedo

 

 

 

 

 

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